En el encantador pueblo de Tamurejo, situado en la provincia de Badajoz, Extremadura, sobrevive uno de los dulces más representativos de la región: el bodigo. Este postre, aunque sencillo en su elaboración, encierra siglos de historia y tradición, siendo una muestra viva de la rica cultura gastronómica que caracteriza a este rincón de España.
Los Bodigos de Tamurejo tienen un origen profundamente ligado a las antiguas costumbres religiosas del pueblo. El término ‘bodigo’ se refería inicialmente a las ofrendas de pan que los habitantes llevaban a la iglesia durante las festividades religiosas. Sin embargo, con el paso del tiempo, esta costumbre fue transformándose hasta convertirse en un dulce especial que se preparaba en las ocasiones más señaladas del año.
El Bodigo de Tamurejo destaca por su simplicidad y por sus ingredientes, que se mezclan con esmero para crear una textura suave y reconfortante.
Cada bocado de este Dulce Típico transporta al pasado, a las tardes en las que los vecinos se reunían para compartir historias y disfrutar de la compañía mutua. Hoy en día, los bodigos de Tamurejo siguen formando parte de las festividades locales, y aunque la receta ha evolucionado en algunas casas, el corazón del dulce sigue siendo el mismo: una conexión viva con las raíces rurales y el respeto por lo tradicional.
Quien prueba un Bodigo de Tamurejo no solo saborea un postre, sino que se adentra en la historia de un pueblo pequeño pero orgulloso, donde la tradición y la identidad se endulzan con cada bocado.-
Receta: Bodigos
RECETA COMPARTIDA POR: Juan Cabanillas
Pesar y medir los ingredientes.
Lavar, secar y rallar la cáscara de las naranjas.
Machacar ligeramente la matalahúva en un mortero.
En un recipiente adecuado colocar la harina, la levadura, la manteca, el vino, el azúcar, la ralladura de naranja, la matalahúva y la manteca.
Amasar todos los ingredientes hasta obtener un compuesto homogéneo.
Dejar reposar la masa en frío 30 minutos.
Pasado el tiempo de reposo espolvorear la mesa de trabajo con un poco de harina, extender la masa dándole un espesor de 3-4 milímetros. Cortar con un aro de 7 centímetros.
Poner un poco de relleno en el centro, doblar la masa dando forma de empanadilla. Perfilar el borde con el cortapastas.
Adornar los extremos de los bodigos con una almendra cruda en cada lado.
Hornear 15-18 minutos a 180º hasta que estén dorados.
Rebozar en azúcar glas cuando aún están tibios.
Dejar enfriar antes de servir.
Ingredientes
Instrucciones
Pesar y medir los ingredientes.
Lavar, secar y rallar la cáscara de las naranjas.
Machacar ligeramente la matalahúva en un mortero.
En un recipiente adecuado colocar la harina, la levadura, la manteca, el vino, el azúcar, la ralladura de naranja, la matalahúva y la manteca.
Amasar todos los ingredientes hasta obtener un compuesto homogéneo.
Dejar reposar la masa en frío 30 minutos.
Pasado el tiempo de reposo espolvorear la mesa de trabajo con un poco de harina, extender la masa dándole un espesor de 3-4 milímetros. Cortar con un aro de 7 centímetros.
Poner un poco de relleno en el centro, doblar la masa dando forma de empanadilla. Perfilar el borde con el cortapastas.
Adornar los extremos de los bodigos con una almendra cruda en cada lado.
Hornear 15-18 minutos a 180º hasta que estén dorados.
Rebozar en azúcar glas cuando aún están tibios.
Dejar enfriar antes de servir.