Pesar y medir los ingredientes.
Infusionar la leche junto con la vaina de vainilla abierta.
Batir las yemas de huevo (guardar las claras para otra elaboración).
Añadir la leche infusionada. Desechar la vaina de vainilla.
Agregar el azúcar, mezclar muy bien hasta que se disuelva.
Cocer el conjunto al baño maría hasta que comience a engordar la crema, tardará de 10 a 12 minutos.
Volcar en un recipiente adecuado. Añadir el azúcar invertido y mezclar con unas varillas. Tapar a piel y dejar enfriar.
Repartir en los moldes con forma de quesito. Congelar.
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